Centro Médico Punta Cana se embarcó hace más de dos años en un proceso de acreditación internacional.
Era un paso lógico después de un periodo exitoso, muy enfocado en procesos y satisfacción del paciente, que necesitaba un nuevo impulso de la mano de una entidad muy reconocida a nivel internacional, como lo es Accreditation Canada.
Los estándares que proporciona la acreditación han sido diseñados para fomentar el mejoramiento continuo de la calidad, además de incentivar el manejo de las buenas prácticas, para afianzar la competitividad del Centro Médico Punta Cana.
La acreditación no es más que una etapa en el camino que hemos emprendido hacia una mejor estandarización de procesos para unos servicios más centrados en la eficiencia y en la seguridad del paciente. No es un fin en sí misma, sino un punto de partida hacia una mejora del centro en todos sus aspectos. El papel de la acreditación ha sido el de enseñarnos a evaluar las prioridades, mejorar procesos y guiarnos hacia la calidad asistencial.
La acreditación será un reconocimiento para validar los progresos que estamos llevando a cabo y demostrar nuestro compromiso hacia la excelencia en la calidad y la seguridad médicas.
La preparación es integral, todo el personal se siente involucrado y demuestra interés, pero a veces no saben cómo canalizar sus iniciativas. Pero para llegar hacia allí tuvimos que preparar bien el terreno e implementar una cultura de seguridad. Es un trabajo arduo y constante que ya tiene visibles sus frutos.
Mediante un pequeño comité evaluado que certifica los progresos mediante una herramienta objetiva. Después de la visita, otro comité se reúne y evalúa si el centro ya está preparado para recibir su sello de calidad.
Significará un antes y un después para nuestro centro, y espero que también una fuente de inspiración para aquellos centros que quieran embarcarse en este proceso apasionante. Cuando lo obtengamos podremos mostrar con orgullo la culminación de un trabajo bien hecho y el compromiso de seguir mejorando nuestros procesos y la calidad y la seguridad de nuestros pacientes.
Son muchos los protocolos que se han puesto en marcha, pero nos hemos centrado en los aspectos de seguridad del paciente con un interés especial, porque es la forma más directa de entregar a nuestros pacientes los resultados de nuestro esfuerzo y nuestro aprendizaje.
El simple hecho de ordenar los que ya sabíamos y mejorar nuestros procesos ya ha sido un premio. El personal se siente mucho más confiado y comprometido. Es curioso comprobar como parte del mismo acude a trabajar en otros centros y su forma de trabajar los destaca. No solamente el centro tendrá una mejor capacitación. El personal ha de ser multiplicador de este conocimiento para elevar los estándares del país entero.